sábado, septiembre 02, 2006

Ciruja

Superácido escondido en sus huellas derrumbó
acaecida la nostalgia tuvo el mismo sin sabor
Cae la noche dijo al verlo
aquél verso ensordecedor
quema, hiela y los extremos hacen que su pan de hoy
váyase yendo en pedazos que no migan el dolor

Pena triste, pena en pena -dijo- pena el que ansia valor

ya no pronuncia, arremete, ya no calla a la sazón
y su rodilla alijera en el seco ardor por dos
y al tocarse su quejido con el motor del vagón
lleva y se lleva, se escurre, en relámpago a estribor
buque que anuncia días, buque, su propio yo
aguas cercanas lo rozan, marinero del amor

y así fulgurante él espina
y así como quiso ocurrió
el día lo espera inerte
pero él ya lo alcanzó.
Dijo
- Puro verso doña!
y salió pal metegol.

- Ey! que el cartílago escapa del timbre a tu postor!
- Si es así que lo cuaje. Me gusta sin ese olor.
- Rompe que rompe quinotos resultamos vos y yo.
- Zi, zi, claro zi. Zi total se cae de a dos.
- Viejo intento el que querés. Y dónde está ese olor?
- Que me lloren los oídos si no escuchás por tu voz. No ves que este caballito la bosta aquí nos dejó?
- Oh pequeño platerito, cómo es que repercutió?
- Tiene sueño, oh dejalo. Que es viejo el pobre a labor.
- Pero acelera su paso si trota tu pantalón.
- Pues que sigamos yo digo, o es que tiene usted pudor?
- los zapatitos me aprietan, las medias me dan calor..
- y el vecinito de enfrente cagó, se fue y no limpió. Puta que es duro tu escote, hierro de loza e cartón!
- Váyase a ver si llueve, no ve que de tiempo me voy?
- Ay doña si el muerto supiera cuánto la estimo yo.
- Moriría hoy diez veces con tal de sentir su calor.
- La guitarra de mis ecos es mi cuerpo hecho canción, para usted mis mañanitas.
- Para vos mi piel de sol.